Carmen es la última ópera y obra maestra de Georges Bizet, basada en la novela de Prosper Mérimée. Escandalosamente realista y moderna para la época, lo que probablemente la hizo fracasar al principio, pero, sin embargo, gracias a sus melodías, rápidamente se convirtió en un éxito mundial ininterrumpido y uno de los títulos más populares de la Historia de la Ópera. En esta ocasión llega al Teatro Real con René Jacobs, Sabine Devieihe y la orquesta B’Rock.
Aunque la gran obra maestra de Georges Bizet se ha mantenido –ya casi durante un siglo y medio– como una de las más populares del repertorio, durante sus primeros cien años fue conocida universalmente a través de una versión adulterada que sustituyó las partes habladas originales por recitativos, efectuada por Ernest Guiraud con el propósito de abrirle las puertas de los grandes coliseos.
La restauración –a partir de la década de 1970– de la versión estrenada en la Opéra Comique de París en 1875 no supuso, en todo caso, la recuperación de la versión «original» de esta obra, pues habiendo sido terminada un año antes, solo subió a escena tras atender sucesivas demandas de directores de teatro, músicos y coristas, obligando al autor a reescribir numerosos pasajes y pergeñar otros ex novo: la mismísima habanera nació del rechazo de la protagonista –la mezzosoprano Célestine Galli-Marié– de la pieza originalmente prevista para su entrada en escena. El director René Jacobs ha querido retraerse a la redacción inicial de esta inmortal obra para descubrirla –y disfrutarla– una vez más, de acuerdo con las intenciones originales de su autor.
