Más intimista y considerada con los cantantes, El castillo de Barbazul nos permitió disfrutar de las cualidades de una nuevamente inspirada Vizin y de un excelente bajo, el húngaro Krisztián Cser. Frente a una Judit expresiva y seductora, el Barbazul de Cser, impávido en todo momento, se mostró como un ser frío y misterioso. Sin embargo, fue vocalmente sobrecogedor. Cser no sólo asombró por su volumen, sino también por su registro agudo natural, en ningún momento forzado. | | More intimate and considerate with the singers, 'The Castle of Bluebeard' allowed us to enjoy the qualities of a newly inspired Vizin and an excellent bass, the Hungarian Krisztián Cser. Facing an expressive and seductive Judit, Cser's Bluebeard, imperturbable at all times, appeared as a cold and mysterious being. However, he was vocally overwhelming. Cser not only amazed with his volume but also with his natural high register, which at no time seemed forced.